La torre noroeste

Estimado visitante, bienvenido a la torre noroeste.

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La torre es un cuerpo paralelepípedo de base romboidal; se apoya sobre un alto pedestal troncopiramidal de caras fuertemente abocinadas.

Su estructura de muro está formada por pequeños sillares dispuestos en hileras paralelas.
Probablemente, en su primera instalación, la torre debió quedar aislada del resto de la fortaleza.

Podrás notar estos elementos constructivos tan pronto como estés fuera del Castillo, caminando hasta el final de via Terravecchia en el antiguo pueblo medieval.

Subiendo las escaleras que conducen al entrepiso de madera podrás admirar el pueblo desde una ventana. Se trata de una ventana ajimezada con arcos en el centro con el escudo abate. La ventana parteluz se coloca a una altura entre el suelo de la habitación del segundo piso y el techo de la torre.

Aquí la bóveda es de crucería con penachos rematados en piedra de Billiemi.

Volviendo al piso de abajo, a través de la pequeña puerta, caracterizada por un arco apuntado, se sale a una pequeña terraza, de reciente creación, que permite observar el panorama de la ciudad.

 

¡Te invito a salir a la terraza y disfrutar del espectáculo!

 

Mirando hacia las almenas, se observan las ménsulas, que encajan firmemente en la mampostería, unidas entre sí por losas monolíticas rectangulares sobre las que se colocan tres hileras de sillares de diferentes cortes y alturas.

El único elemento decorativo está representado por rosetones esculpidos de cinco pétalos, colocados en la parte superior del pretil, en las placas de unión y en las caras internas de las ménsulas.
Los marcos planos creados en los bordes de las placas que conectan los estantes subrayan este motivo decorativo.

Otro elemento decorativo es la hoja de acanto creada en bajo relieve en los cuatro estantes de las esquinas; sobre éstos se levantan cuatro almenas con la típica forma de gancho.
Entre las ménsulas se encuentran los clásicos matacanes colocados para defender la torre.

Si miras hacia el trasdós del primer estante de la izquierda, podrás notar un detalle decorativo: una mano tallada en el estante.

La mano, aparentemente femenina, está abierta y con el dorso hacia afuera.
No está claro qué significado tiene este detalle. Su representación simbólica podría revivir la leyenda popular según la cual la baronesa Laura, herida de muerte, dejó la huella de su mano ensangrentada en la pared de su habitación.
Una hipótesis que, por supuesto, no puede considerarse válida, ya que el sangriento acontecimiento se remonta a 1563, mientras que el período de construcción de la torre es mucho anterior. A menos que algunas partes de la torre fueran remodeladas después de esa fecha, en cuyo caso la leyenda se hace realidad. 

 

Probablemente podría ser un símbolo de suerte vinculado a una mano de obra árabe como la mano de Fátima o, más probablemente, la firma de la mano de obra que decoraba las almenas de la torre.

 

Os invito ahora a continuar la visita y llegar, por el pasillo que hay justo delante de la entrada a la sala de acceso a la torre, a la sala  del crimen de la baronesa de Carini.